Lunes 21 de Agosto de 2006 fallece Máximo Carvajal, destacado dibujante de comics nacional. Tuvo gran participación en la época Zig Zag ocupándose de tÃtulos como El Intocable, Trinchera y el Siniestro Doctor Mortis, entre muchas otras. Su trabajo influencia a gran parte de las siguientes generaciones y ha trascendido hasta el dÃa de hoy.
Su funeral será hoy, 23 de agosto, a las 13.00 en el cementerio Parque el Prado, paradero 24 ½ de la florida.
Acabo de entrar a Internet y me he enterado de la muerte de Maximo Carvajal el pasado 21 de Agosto.
Mi nombre es Felipe Armas y soy actor.Creci coleccionando la revista EL SINIESTRO DR.MORTIS,que editorial Zig Zag lanzò a los quioscos del pais en 1966.
Tengo con mucho orgullo y muy bien conservadas con un sistema antipolvo y humedad ,toda mi coleccion de esta revista en sus primeros 105 numeros,es decir toda la primera etapa(1966-1972).Siento mucho que el Sr Carvajal nos haya dejado, relativamente joven,a los 71 años.
Les dejo mis mas sentidas condolencias.
Con pena y nostalgia.
FELIPE ARMAS
pd.Siempre estoy mirando vuestro Sitio.Si me necesitan en cualquier cosa que los pueda ayudar,cuenten conmigo.
Les dejo mi pag WEB
http://www.felipearmas.cl
Gracias.
Me enteré demasiado tarde del deceso de Máximo. Recién hoy preparando algunas carpetas de prensa leà un obituario de El Mercurio del 26 de agosto.
Nadie dice nada de que Máximo fue además de un importante creador, un ser humano extraordinario y que su generosidad lo llevó incluso a convertirse en un torturado y preso polÃtico más de la dictadura en 1984, porque se puso con todo para recuperar la democracia.
Tuve el honor de conocerlo en la Cárcel Pública ese año, pero sobre todo, el privilegio de descubrir a un ser humano excepcional, dueño de un corazón gigante, de un humor mágico y de una inventiva alucinante, que a muchos no hicieron más llevadera la prisión e incluso hicimos armas de sus virtudes, para abordar plenamente la vida. Conocerlo en esas circunstancias fue una sorpresa descomunal, porque yo habÃa leÃdo de niño muchos de sus cómics de los años sesenta.
No alcanzo a medir la amargura que me provocó su partida sin siquiera saberlo. Sin haber vuelto a conversar con él antes de ello.
Ojalá que muchos de los que le quieren hayan estado junto a él antes que se marchara. Supongo que muchos de quienes estuvimos con él en prisión no nos enteramos a tiempo de nada. Es una pena enorme.
Raúl Blanchet
q todo lo q no obtubo aqui en la tierra la obtenga en su cosmos infinito q creaba con sus monos , tengo varios comics de el y lejos un maestro , ojala q pronto nos veamos en alguna parte tal como estuvimops todos el 2003 para un evento ergocomics ……….stay heavy maximo ………………..
a veces la vida nos aprieta el alma con más fuerza, nos sacude y remece a más no poder, y eso me acontece con la partida de este gran hombre que llevaba la alegrÃa y la curiosidad de un niño en su andar por la vida.
no tengo ninguna duda que allà donde esté, buscará la excusa para inventar un mono y una historia, endulzará el entorno con su mirar limpio y claro, abrigará las noches con mil historias y extenderá su manos tibias y compañeras para subir, a quien esté dispuesto a sus mundos encendidos de fantasÃa y humanidad.
Soy Patricio Avalos, dibujante autodidacta por hobbie y crecà con los comics de varios maestros de la talla de Don Máximo como Abel Romero o Nato. Don Máximo, sin duda, fue uno de los mejores Maestros del comic, especialmente en sus viñetas del “Siniestro Doctor Mortis” que eran sensacionales. Mis condolencias a su familia y decirles que no ha muerto, sólo ha cambiado su estado y su espÃritu y legado seguirá con nosotros con más fuerza aún. Sursum Corda, Don Máximo !!! Patricio, http://www.lospalomitos.cl, contacto@lospalomitos.cl
Que pena grande. Al viejo lo conocé hace años en las reuniones que hacÃan los amigos del comic o en las exposiciones de algunos de ellos. Después nos Ãbamos a tomar unas chelas y unos completos. Yo era un recién llegado pero encontrarse con esta gente era como encontrarte con primos o amigos de toda la vida. Hablábamos el mismo idioma, habÃamos leido lo mismo y el viejo era uno más de nosotros, de echo no era un viejo, tenÃa el mismo entusiasmo, jovialidad y pasión que nosotros. La diferencia la marcaban sus historias, su experiencia, su talento. Nos quedábamos callados cuando contaba lo vivido allá en la época de oro del comic.
Te mando un abrazo Máximo, allá donde estés. Seguro dibujando en el cielo…